El Grupo Socialista ha propuesto en la Junta de Gobierno que se traslade el rechazo del Ayuntamiento de Palencia a la Junta de Castilla y León y al Sacyl por el cierre de 60 camas en el Hospital “Río Carrión” en el periodo de 28 de junio al 29 de septiembre. Desde el PSOE se considera necesaria esta petición por sus repercusiones negativas para la Sanidad Pública, ya que al disminuirse la actividad asistencial se produce un incremento de las listas de espera debido a que el personal sanitario que disfruta las vacaciones no es sustituido, lo que conlleva el cierre de las camas.

La explicación que se ha dado desde el Sacyl y desde la Junta de Castilla y León este cierre de las camas del Hospital se hace para rentabilizar las plazas. Desde el PSOE no se discute que sea bueno ajustar los costes a las necesidades, pero sin la pérdida de calidad de los servicios. 

El Grupo Socialista no comparte el cierre de camas en el Hospital Río Carrión, en base a disfrazar la realidad aludiendo a la mejora de la gestión y a una mayor eficiencia en la sanidad pública. De hecho, el cierre tiene negativos efectos colaterales para las personas usuarias al cerrarse la planta de paliativos que está en San Telmo, reubicándose los enfermos a la primera planta del Hospital Río Carrión, junto con cirugía; se cierra la 4ª planta del materno, reubicándose los pacientes entre la 3ª y la 5ª planta y se cierra la unidad de rehabilitación de salud mental, que se deriva a otro lugar.

Para los concejales socialistas el problema radica en la negativa a sustituir las bajas en la plantilla que se encuentra de vacaciones lo que motiva el cierre de las camas por falta de personal, “por la maldita tasa de reposición” que impide la contratación del personal sanitario para cubrir las bajas y vacaciones, que tanto perjudica a la sanidad pública y al empleo de este personal, que engrosa las listas de parados y están optando en bastantes casos por emigrar.

Desde el Grupo Socialista se critica la decisión del Sacyl de cerrar 60 camas del Hospital Río Carrión durante los meses del julio, agosto y septiembre y se solicita que la Junta de Castilla y León explique esta medida que tienen negativos efectos colaterales para los usuarios de la sanidad pública en Palencia.